lunes, 29 de marzo de 2010

Reloj del mal

Tengo una semana aproximadamente con el reloj de mí laptop con una hora adelantada, y aunque tenga varios días así, no sé porque no he podido hacerme a la idea de que no está en la hora correcta o simplemente cambiar la hora.

Las consecuencias de no hacerme a la idea de que esa hora no es la correcta han sido:

*Meterme uno que otro susto cuando tengo que ir a "algún" lugar a "cierta" hora y pensar que ya voy demasiado tarde (y eso que yo llego tarde al 74.3% de mis actividades).

*Rechazar salidas, o hacer comentarios que me hacen lucir como una verdadera idiota como: "Ya son las 23:30, ¿Porqué no me hablaste antes?, respuesta: "Marisol, son apenas las 10 y media" (grr).

No sé porque a veces me cuesta aceptar las cosas de la manera en la que realmente son, no como quisiera que fueran, esto de ser adulto es una mierda, escupo en las responsabilidades, y en aceptar las cosas sin que estén disfrazadas, no por nada dicen que la ignorancia es la forma más feliz de ser feliz. Con una mano te tapas un ojo con el otro vez a donde se te de tu gana.

Creo que es hora de hacer cambios, ya no quiero tenerle miedo a las manecillas...

sábado, 27 de marzo de 2010

Hoy seré tú noche


Está noche pinta para ser destructiva y con un nivel de alcohol y excesos. Acabo de comprar unos tacones de teibolera que tienen vida propia y quieren rumba. Como soy una mujer complaciente les daré lo que me pidan, al fin estoy de vacaciones, he trabajado mucho estos días y quiero relajarme con todos mis vicios.
Hay mucha gente que me dice que tengo demasiados demonios internos, pero no saben que mis diablos y yo somos buenos amigos, está noche aterrorizaremos la ciudad, es hora de sembrar el pánico, en tacones y una pequeña falda que resalte mis curvas latinas.
Hoy voy a ser tú noche y si quieres voy a ser hasta tu gloria, solamente sigue mis instrucciones y sé bueno conmigo, pienso tratarte bien, y voy a hacer que se te olvide tú nombre y hasta el apellido. Vas a ser mío y te va a gustar...
Quiero que me beses hasta que nos descubra el sol.

jueves, 25 de marzo de 2010

El experimento ha fallado


Hijos míos, debo de confesar que mi experimento de "limpieza espiritual" se fue al carajo, estos días han sido de puro degenere y gozadera, soy una mala persona y lo peor es que me vale madre. Mí fuerza de voluntad está perdida, si alguien la encuentra favor de devolverla.

De repente como que me mortifico por cosas que no valen la pena, y hago un aracle por lo que ni siquiera importa, o me preocupo por gente que no debería siquiera molestarme, creo que aún soy un pequeño vortex, aún no aprendo a no lastimarme, y peor aún, de repente soy una mala hierba que crece en otras personas, alimentandome de ellas.

Estoy tranquila, sigo destruyéndome felizmente poco a poco, sin dormir y mucha fiesta, mi vida es un pintoresco oleo lleno de excesos y malos hábitos, aún así, estoy en paz. Estoy demasiado loca para un mundo tan cuerdo, un mundo que fue hecho por gente imperfecta que no saben lo que buscan, pero si como exigirlo.

En lo que definitivamente parece ser no tengo nada de suerte es en el lado de la pareja, parece ser que moriré sola, en una casa llena de gatos, coleccionando periódicos viejos donde solía escribir, platicándole a mis felinos lo buena periodista que era. Comparado con un matrimonio aburrido, lleno de hijos con más problemas internos que yo, no suena tan mal...

martes, 23 de marzo de 2010

Un día a la vez..


Este es un día neutro, sin un bien o un mal, sin oficio ni beneficio, solamente otro número en el calendario, otro amanecer, otra vez la luna, otra vez lo mismo de todos los días, la escuela, el mismo camino, todo está igual, menos tú, quien sabe dónde diablos andes.

Me acuerdo cuando las mañanas sabían diferente y la lluvia tenía colores, ¿Cuando dejo de brillar el sol? ahora el clima es frio, y tú te enfriaste junto con él.

No sé si sea la llegada de la primavera, pero todo mundo tiene una pareja, yo aún no encuentro a nadie que valga la pena, aún no me encuentro ni a mi misma, haber que pasa, habrá que cerrar los ojitos y dejar que nos lleve el viento..


domingo, 21 de marzo de 2010

7 días: experimento


A partir de este día o lo que sea que es hoy, he decidido dejar por 7 días muchas cosas que no me están haciendo ningún bien, va a ser como una especie de desintoxicación.

He vivido años haciéndome daño, tratando de hacer sentir a muchas personas tan mal como yo. No sé porque me gusta joderme yo solita, me saboteo en la vida y luego me lamento por 6 segundos, porque me vale madre y vuelvo a lo que digo que no iba a hacer, camino en círculos, que débil puedo ser algunas veces.

Una semana no es nada, pero parece que no aprendo, así que mejor le declaro una tregua momentánea a mi corazoncito, a mis pulmones, mi riñon derecho y a los demás órganos que desmadro todos los días, me caga aceptar lo que no quiero y hacer lo que se tiene que hacer, aún estoy en el periodo de negación, ya después seguiré con las demás etapas de la muerte.

Les diré como me fue el próximo domingo, si el experimento falla, tendré mi fin de semana autodestructivo "tijuana style", lo cual no suena nada mal, necesito aquelarres como esos, quiero ser vetada de más bodas, escupo en las uniones legales, arriba el amasiato.

jueves, 18 de marzo de 2010

más bla bla


Esta noche como que no quiero escribir mucho, pero como aquí me terapeo pues escribamos. Tengo mucho trabajo, pero no estoy muy concentrada que digamos, perdí mi mojo, me perdí yo misma y apenas comienza la búsqueda...

Algunas veces, por ayudar a las personas, por pensar un: "Al rato hago lo mío", me olvido de mí. Escupo en mi espíritu altruista, quiero ser una perra egoísta, un buda gordo de la fortuna que no se preocupa más que en sus lonjas y su riqueza.

Los hombres y las mujeres no pueden ser amigos, no lo han sido y nunca lo serán (salvo sus honrosas ocasiones, pero para esto uno de los dos es homosexual ó está en una relación), así que eso de tratar de llevarte bien con el sexo opuesto es una sarta de mentiras.

De repente trato a los varones como personas y se me olvida que son hombres.


so disappointed...fuck

domingo, 14 de marzo de 2010

Te lo dije


De repente, tenemos una vocecita adentro de nosotras que nos dice de una dulce forma: "Te lo dije pendeja, pero no me haces caso", algo así como las mamá; que siempre te dicen algo y por lo general tienen razón (Odio eso por cierto).

¿Qué de plano estamos tan dañadas estas generaciones? Culpo a la televisión, a las malas compañías, al internet, a los bubalo, a los malos besadores, a la coca cola, a los conservadores en los enlatados, a los golpes en la cabeza con ese estante del baño que tanto odio y me ha descontado más de una vez, a todo lo que me haga relegar mis responsabilidades ante un criterio más maduro ante la vida.

De repente hago cosas que se que están mal, que se que no van a salir, que se van a lastimar, y no me detengo a medir consecuencias, solamente me hago de la vista gorda como oficial de tránsito en periférico.

No es fácil hacer lo correcto. No lo es para mí. Este fin ya voy a sacar la basura de mi vida, promesa porque lo necesito, porque uno no puede vivir rodeada de cosas que no sirven, de cosas muertas, de gente que no te da más de lo que tú les das, eso de que no esperamos nada de las otras personas es una mentira, siempre esperamos algo de las personas, no es interés, es reciprocidad y no tiene nada de malo.

viernes, 12 de marzo de 2010

party lengerie


Me encanta la paranoia femenina, como una ve guapo a su hombre, piensas que todas las demás mujeres lo ven igual, así que cuando sabes que él susodicho anda en la calle, uno comienza a imaginar que hace de las suyas, con tragos coquetos, rameras hasta donde alcance la vista y metros de cocaína.

Nos mordemos las uñas y maldecimos al sujeto, a su madre, a todo su árbol genealógico, creamos en nuestra mente toda una escena de gang bang salvaje interracial. Mientras que el macho esta solamente jugando nintendo, engordando más con cerveza y hablando de tetas de las viejas que salen en la tele con sus amigos, clasificándolas por color, tamaño y peso.

jueves, 11 de marzo de 2010

Santisima virgen de la infelicidad, rogad por nosotros


Después de tantas letras, tantos lamentos, tantas risas, tantas historias estúpidas que contar y compartir como testimonio de vida ante varias féminas, me acabo de dar cuenta de algo bastante pendejo, igual y lo tuve en mis narices todo este tiempo, pero estas malditas hormonas de repente me ciegan bastante. Las feromonas son del diablo.

He descubierto, que las mujeres somos infelices, porque queremos, por la sencilla razón de que no decimos lo que realmente opinamos o deseamos. Nos hacemos las mártires de nuestra propia crucifixión voluntaria, siendo que muchas otras veces podemos ser tan felices y hacerle la vida agradable a los demás, con solo decirlo.

Algunas veces sufrimos por algún hombre por ejemplo, andamos lloriqueando con nuestras contemporáneas, diciendo una sarta de sandeces, haciendo juntas femeninas, casi hasta compitiendo haber a quien le va peor en la vida. Hacemos nuestra existencia imposible, porque nos lo proponemos, hacemos las cosas complicadas, porque pensamos que hacemos todo mejor cuando nos hacemos a un ladito para que pase la demás gente. Tenemos que aprender que decir las cosas es la mejor manera, ya que algunas veces, quedarnos calladas es solamente seguir con lo mismo, estáticas en un mundo en constante movimiento, es antinatural.

A pesar de esto, así nos aman. No por nada hemos causado más de una guerra e inspirado obras de arte, somos musas de la vida, inspiramos amor y provocamos pasión, así es y así será, por los siglos de los siglos. Amén

martes, 9 de marzo de 2010

Un mal día


Hoy fue uno de esos días, en los que sientes que trabajaste como esclavo medieval y no obtuviste nada de lo que quisiste, todo salió de las patas, así como si me hubiera dicho a mí misma: "haber, que hoy me salga todo de la chingada", escupo en la actitud ganadora; me cagan estas ocasiones "Murpheanas". Quiero días buenos, con un clima cálido y besos sabor chocolate.

Para acabarla de joder, tome muchas fotos que necesitaba para hacer un trabajo, y mi celular decidió vengarse de mí exagerado uso casí violatorio hacia él, y las pinches fotos aplicaron la de "Houdini" y desaparecieron. Nada por aquí, nada por allá. Necesito alcohol barato, drogas y un hombrezuelo que me calme porque estoy Enojada con "E" mayúscula.

Pero en fin, el mundo sigue girando y el ciclo de la vida continúa sin inmutarse ante mi grandioso día, el cual solo fue una broma de dios. Otro día de estos y planearé algún atentado terrorista. O algo que demuestre mi ira interna, ok ya me desquite, no queda nada más que decir: grr.

domingo, 7 de marzo de 2010

Nosotros los locos


Nosotros los locos, somos lo que conquistamos el mundo
los que se alejan, los que hacen leyendas
somos los que nos quedamos solos...

Somos inmortales ante la lengua del hombre
gente cuerda que espera con ansias nuestro siguiente paso
nuestra siguiente batalla, nuestra siguiente caricia.
Vemos cosas en la gente que a lo mejor no existen
por eso nos desilusionan tan fácil,
por darle dones de dioses a simples mortales.

Siempre vamos a querer lo que no podemos tener
porque no se necesita conquistar lo que ya es de uno
por eso siempre buscamos lo que no existe.

viernes, 5 de marzo de 2010

Ya no me sirves, pero te quiero...


Hace varias semanas, mi jechu (abreviado de jefecita chula) hizo un rico pescado empanizado, el cual toda su familia degusto con gran placer. Pero un filete quedo huerfanito, y mi refrigerador que es tan noble, decidió adoptarlo. Ese pedazo de pez muerto, irónicamente vivió en con nosotros por días. Todo mundo abría el refri, veíamos a nuestro “monstruito”, pero no lo tirábamos, nos encariñamos con el pequeñín.

Todo cambio este sábado, cuando mi hermano tuvo el valor de tirar a nuestro hermano adoptivo, ni siquiera un funeral vikingo le hizo al pobre, de buenas a primeras nos preguntó enojado: ¿Si no sirve, para que lo quieren ahí? Rápidamente abrió el recipiente que lo tenía, y lo tiró a la basura.

Eso igual y fue una pendejada, pero me hizo pensar en cómo algunas veces, nos acostumbramos a situaciones malas en la vida, pero aprendemos a vivir con ellas, nos resignamos a vivir con cosas podridas, hasta que alguien nos tira el pescadito a la basura, siendo que nosotros deberíamos de saber, que ese espacio puede ser ocupado por cosas mejores, en lugar de tenerlo para cosas que no nos sirven para nada.

Así somos algunas veces, nos aferramos a cosas innecesarias, a personas que invocamos, que aunque no estén en nuestras vidas las queremos a nuestro lado, siendo que sabemos que estamos mejor sin ellos, solamente le guardamos lugar a cosas inútiles, no nos ponemos a pensar que hasta el agua estancada, se echa a perder.

miércoles, 3 de marzo de 2010

Mientras más conozco a los hombres, más quiero a mi perro


"Mientras más conozco a los hombres, más quiero a mi perro", era el dicho de Susanita, una de mis amigas cachondas que como su servidora, también ha tenido una suerte del nabo en el amor. El buen Roro (nombre del can) fue un regalo de uno de los novios de mi amiga. No fue un regalo que le emocionara mucho, pero como era de Raúl, pues le tuvo que gustar a la fuerza.

Ese cachorrito fue creciendo, pero el amor de Susana y Raúl se iba al diablo. Terminaron porque se dieron cuenta que lo único que tenían en común era su amor por el Roro. Después de eso, ni Susy ni su perro quisieron saber de hombres por un buen tiempo. Cada vez que iba un hombre a cortejar a la señorita, el perro le espantaba a los pretendientes.

Esto parecía no molestarle a la ya antes mencionada mujer, incluso era gracioso el cómo dicho cuadrúpedo era el "agente de calidad", olía a los hombres, los miraba fijamente y si no le gustaban, empezaba a ladrar y a querer morder como loco.

Todo esto llego a su límite, cuando mi mujercita encontró un varón que llenara su huequito del amor y sus otros hoyitos. El problema fue que el Roro no acepto a su nuevo papí, durante meses que Susana salió con este hombre, el perro ladraba, gruñía, hasta pipí le hizo a la mochila del sujeto. Por lo que tuvimos que llegar a la decisión (digo tuvimos, porque yo tengo que oír el lloriqueo de mi amiga cada vez que el perro hacía de las suyas).

Por desgracia, Roro ya no está entre nosotros. Y no digo porque lo matamos, sino porque se lo devolvimos a Raúl, quién sabe que irá a ser de esos machos, pero por algo dicen que el perro es el mejor amigo del hombre, porque si a la mujer nos espanta las presas, lo mandamos a chingar a su madre (o al que nos lo regalo).