sábado, 10 de diciembre de 2011

Otra diosa incomprendida

Mis piernas son su casa de verano
donde descansa, duerme, aprende a besar,
Y de dónde huye en cuanto cierro mis ojos.

Mis brazos son sus cómplices
donde se esconde de la gente que le dice como portarse y como se vive.
Mi columna se desploma, algunas veces el alma pesa tanto y el respirar ahoga.
Robas mis suspiros, mis sueños y mi risa, me dejas sin nada, sin ti y sin mí...

Necesito rescatarme, antes de que me pierda de nuevo en tus labios.

domingo, 4 de diciembre de 2011

Jugando jugandito

Que jueguen con mi cabello y repitan una y otra vez todos esos clichés cursis

No importa que no haya rosas en el lecho

Al fin y al cabo, ya estoy acostumbrada a caminar entre las espinas.

Esta noche solo he dado vueltas en mi cama

Evitando pensar y solo viendo como cada quien esta con su cada cual

Por lo visto el roto aún no le llega a esta descocida.

Estos días han sido como el clima de mi ciudad, ni frío ni calor, solo un poco de nubes, pero últimamente podría escribir algún libro titulado “Como las hormonas controlan mi cuerpo: mil testimonios para noches de insomnio”, estos días de estar juntos y separados, son solo una suma de lo que éramos y una resta de lo que queda.

Me molestas mucho y lo peor es que me enojo conmigo misma, mis voces internas y mis múltiples personalidades no logran ponerse de acuerdo contigo, unas gritan, otras lloran y otras quieren ahogarte a besos.

¿Cuándo la vida se dejó de arreglar con algodones de azúcar y una bandita para la herida? Extraño esos tiempos. Ya todo son facturas, ropa de invierno, cobijas extra y días de hacer la lavandería. Aún busco esos días donde con un suéter combatía al mundo y cuando no importaba si la lluvia vestía mi cuerpo, a fin de cuentas iba a secar.

Tal vez necesito un poco de soledad, silencio y mucha música, pero me supongo que mañana continúan las carreras, los mensajes que no sé si contestar y el pensar que los años pasan, los cuales miro en las manos de mi madre y en el espejo de mi baño todos los días.

Esta noche no me gustas tanto…



jueves, 6 de octubre de 2011

Un cigarrito para el alma

Sigo sin entender, sin sentir, sin mirar, en un aparador donde a veces vivo, con el amor fuera de temporada y en oferta, tazas de ‎​café rápidas y ese despertador que siempre me molesta a las 7 de la mañana.

El corazón confundido y la vida sin sentido deberían de ser mis características principales, a veces con tanto sentido y otras veces como un reloj, que siempre avanza pero siempre terminan en los mismos números, solo da vuelta, solo escucha el tic tac.

Ya necesitaba escribir, algunas veces quiero evitar mis letras pero no se puede esconder lo que viene en ellas.

Últimamente como me ha gustado tener un cigarro en mis labios y otras veces otras bocas, pero estás terminan sabiendo a traición por lo que regreso a mis vicios y de nueva cuenta, a mis letras que no riman y que hablan de otra cosa que no seas tú.

Hace falta un amante que caliente el camastro, unas mentiras para el corazón y algunas palabras dulces para engañarme un rato y volver a ser esa dulcinea de cantinas. Pero no es mi culpa, a mí me enseñaron a esperar al príncipe en la torre.

Nuevamente, el desfile de amantes de cuarta y hasta de quinta regresa y se reciclan. Deberían de ser biodegradables, no volver, tener alas y volar lejos.

Este día me venció el mundo, a mí y a mis múltiples personales, ando de paranoica pensando que nadie es lo que parece, ni yo.

No queda de otra más que lavar platos mientras escucho a Chabela Vargas, mientras cometo de nuevo los errores que me prometí no volver a hacer, caigo en mis propias trampas, pero, ¿Cómo resistirme a esos ojos?

Me caes mal, pero bailemos un rato, al menos en lo que acaba la canción.

martes, 6 de septiembre de 2011

C'est la vie...


Un día lleno de nubes y vientos del norte se pueden convertir en una tormenta en un abrir y cerrar de ojos. El olor a tu cuerpo, a traición, a mentira. Creo que era cuestión de tiempo, pero no pensé que esa hora fuera a llegar.

Sola, triste, sentada en la obscuridad y tecleando, pagando karma, pagando pecados y de paso limpiando el alma. Mientras pienso en esa lengua venenosa que no recorrerá mi cuerpo, ni mis labios, nada, lo querías todo y ahora estás sin mí.

Olvido las reglas del juego y quiero hacer las mismas, pero olvido lo fácil que puedo perder, lo sencillo que es ser engañado, pero ¿Qué amor en la historia no ha terminado en tragedia y ha sido digno de recordar? Ganaste soledad, de nuevo vuelvo a ti, a tus fríos brazos que me hacen olvidar.

Necesito tiempo, alcohol, faldas cortas, labios color cereza, dejar de dibujar castillos en el cielo y permitir que la tierra ensucie mis zapatos. Estaba volando tan alto que la caída dolió más. Volé como Ícaro, toqué el sol, quemé mis alas, caí y la espuma del mar mojó mis alas.

Tantas veces he tenido plumas y no he sabido usarlas, habrá que dejar que se recuperen, que duerman un rato, que cierren las costras y debo de pensar que te diré mañana, cuando seguramente me busques con una estúpida excusa, de esas que te salen tan bien y de esas que yo prefiero creer.

Estoy muy cansada de ti. Descansa en paz y no vuelvas. Amén

sábado, 6 de agosto de 2011

Ni santa ni puta, solo mujer


Llegan los días de lluvias y con ellos cielos nublados y vientos de cambio. Se van personas queridas, se quedan personas amadas y llegan extraños por seguir desconociendo (de preferencia y por salud mental). Hay personas que deberían de quedarse en los recuerdos o no meterse en el presente de uno, pero aunque se quieran salir, uno les jala el pie, la mano y lo que se dejen con tal de que se queden un rato con nosotros. Por lo menos hasta que termine la canción, porque es muy feo bailar sola.

Hace unos días perdí a un hombre en mi vida: mi abuelo. Qué triste es dejar de ver a alguien que uno en sí ya tenía en olvido. Pero lo que me consuela es el pensar que ya está con su chata. Ella lo esperaba desde hace años y él la extrañaba tanto, que un día su corazón ya no quiso latir; simplemente ya no encontró motivos para tanta lejanía.

Yo sigo en mis limbos amorosos. En ese cielo infernal en el que tengo años y como la marea, viene y se va pero no se decide, creo que en cierta manera ni yo tampoco. Es por eso que me la paso viendo sus olas y dejo que algunas veces me arrastre un poco la corriente. Lástima que me comienza a aburrir. El día que no sea una persona tan destructiva voy a aprender a querer a quien me ama sin importar distancia, ni mares que nos separen, porque de una u otra forma los dos seguimos durmiendo bajo las mismas estrellas.

Pero como no podía faltar el drama, en cuanto uno dice “seré buena y sumisa”, se aparece el diablo en nuestra vida, se pone en nuestro hombro y comienza a invitar a personas que vienen solo un ratito a nosotros, no se pueden quedar más ni aunque quisiéramos, ni aunque ellos así lo desearan. Son tan solo tentaciones que no terminan por convencer a nadie, pero a las que no decimos que no. Ser buena debería de ser fácil.

¿Y si solo nos queremos un rato? Lo suficiente para ser felices pero no tanto para podernos olvidar. Quiero un anillo en mi mano y mensajes en mi teléfono, pero no es mi culpa de que me lleguen hombres de vez en cuando. Mi corazón tiene dueño, pero el cuerpo cuenta aparte y por desgracia, mis brazos son más tercos que yo.

[Grrr...]

domingo, 17 de julio de 2011

Esos cuentos de amor y otras cosas feas


No andaba muerta ni secuestrada, simplemente andaba de tan buen humor que no me veía en la necesidad de utilizar mi blog para "terapearme" de mis hormonas y de la gente mala que me quiere hacer la vida fea, bueno más bien esa gente no existe. Nos encanta hacernos las víctimas, es mejor que ser la bruja del cuento (aunque no he de negar que muchas veces me sale mejor).

El amor sigue ahí, firme y un poco derrumbado, la impotencia de no tener la última palabra me vuelve loca, no me gusta pensar que alguien más va a decidir por mí, porque sino ya no me estaría quejando de la distancia, y serían tus labios lo que sentiría en mi espalda en lugar del viento del ventilador.

Creo que en mucha parte estoy así porque soy la persona que tiene menos paciencia y más la necesita; debo de enfocarme en hacer simplemente lo que tengo pendiente y dejar que las cosas se den solas, pero a veces las fuerzo tanto que se rompen.

Pero por otro lado, si cada quien hiciera realmente lo que le corresponde, no habría psiquiatras ni prostitutas y las mamás se quedarían sin nada que hacer en el día. Hasta cierto punto el egoísmo es altruista y causante de empleo.

Lo más fácil sería dejarte ir, pero mis brazos son muy necios y tu sombra no me deja, acompaña a la mía y es buena dando besos. No la deja sola. Muy mal acostumbrada a buenos tratos, muy acostumbrada a nosotros.

El problema es que mis caprichos algunas veces parecen más grandes que mis ganas de estar contigo, pero eso de que tengo maestría en boicotear relaciones amorosas ya no me extraña.

En fin, por primera vez en mi vida me comportaré como una mujer adulta y no haré nada más que esperar. Esta frase fue efecto de blogear sensible y en domingo, pero debo de aprender a que no siempre sé es la heroína, no siempre se es la víctima. Lo que me falta algunas veces es dejar que me rescate el príncipe, no ser la princesa guerrera que siempre tiene la espada en la mano.

...don't need to be alone,
no need to be alone.

It's real love, it's real...

jueves, 16 de junio de 2011

Si no me acuerdo, no pasó


Algunas veces me persiguen los recuerdos, otras veces los persigo yo, pero muchas veces se quedan en la calle, tirados, en el olvido. Qué bonito es no tener memoria, soy una dama tan desmemoriada que casi casi hasta pudiera hacerla de política.

Estos días varios "amigos" fallan, el amor vuelve y se aleja la cordura, llego de nuevo mi compañero de vida el estrés a darme de nalgadas todo el día y no de una manera erótica en la que ambos pudiéramos disfrutar...

El amor volvió; más bien nunca se fue. Iba y venía un rato a mí, para alejarse de nuevo, a veces yo huía de él, otras me rechazaba, pero luego de 3 largos y tortuosos años parece que llegó para quedarse, el problema es que no sé cuándo tiempo estará mi invitado conmigo y si realmente lo quiero ahí, aquí y ahora.

Es como cuando un perro persigue una automóvil, si lo alcanzara no sabría qué hacer con él, yo acabo de alcanzar el mío y no tengo ni la menor idea de que pasará, parece que si no hay drama en mi vida no soy feliz, a ver si voy consiguiendo algún otro fetiche para masturbarme.

La vida laboral sigue igual; mucha chamba, mucho calor y muchas letras, sin gerundios ni opiniones, con horario de doctor, bastante presión y muchos ojos revisando lo que haces, aun así no me podría ver haciendo otra cosa, amo el periodismo, es mi placer culposo, lo que me hace morir y me revive de mis cenizas, mi ave Fénix.

Me ofrecen una vida de adulta, con la casita y el combo que toda mujer quisiera y tengo mis dudas, no quiero ni el plan de mi celular con tal de no tener una relación a largo plazo, tener a otra persona, ser de otra persona, pensar en alguien que no sea yo. Vuelven las mismas promesas que una vez me hicieron y llegaron con la misma persona y con ella de vuelta todos esos miedos y mariconadas mías para no comprometerme. Dilemas, dilemas, dilemas.

Irónicamente, no me veo con nadie más y creo que no lo he hecho por años, así que si mi fe en la humanidad no vuelve después de esto, ya nada lo hará. Total, sí María Magdalena pudo reformarse ¿Por qué yo no?


Heart rehab...seni seviyorum

domingo, 15 de mayo de 2011

5:49


Es de madrugada, veo como el sol comienza asomarse en mi cielo, mientras yo pienso si será correcto o no despedirme de ti, decir ese adiós que tanto me ha faltado, el que evadí por años para no ahuyentar tu recuerdo y quedarme sola.

Veo lo que te escribí, aún no estoy segura de enviarlo, sé que no voy a tener respuesta alguna de ella, le dije a mi esperanza que dejara de esperarte, aunque a veces no me escucha.

Amo como nunca me decías que no, y ahora yo tengo que decírmelo sola, no sé ni donde estés ni con quien, solo sé que nunca te ha gustado estar solo y que yo sepa, no eres alguien que cambia sus costumbres.

Estos días parece que soy testigo del amor, lo veo que las muchas bodas a las que he asistido este año. Hay algo en la cara de una novia, su mirada, su vestido blanco, su ramito de flores, el cómo abraza a su nueva adquisición en la pista. Realmente te hacen creer el "hasta que la muerte nos separe".

Lo vivo también en las canciones dedicadas a otras personas, en los abrazos en las calles en las que yo solo fumo o leo el periódico, en los restaurantes donde las personas toman su mano mientras beben un late y mi mano sigue sola.

Parece que generalmente quiero ver cariño donde no lo hay, siendo que donde lo tengo ni lo volteo a ver. Es hora de decirle adiós a la soledad y comenzar a corresponder, en lugar de buscar que me correspondan.

Podría escribir tanto de ti y de tus brazos, de esa espalda que besaba cada mañana o gastar (más) horas pensando en ti, pero ya no me quiero dar ese lujo, necesito un exorcista o algún ajo que te aleje de mi cuello.

Uno no puede buscar a alguien que no quiere ser encontrado.

Y yo me rindo de ti y ante ti.

lunes, 9 de mayo de 2011

Mami 84

De repente tengo temporadas sin poner un post. A veces es porque siento que no tengo nada interesante que postear y otras veces porque me descuido, sin pensar me olvido tanto de mí que ni a mis palabras les prestó atención.

Cumplí 27 y sigo tan sola como cuando tenía 21, ya me hubiera dado un balazo si no es porque sigo siendo la misma talla. Algunas veces siento que evoluciono, otras me estanco a revolcarme en el lodo, y otras veces involuciono (nunca había usado esa palabra, que adulta soy).

Sabes que las cosas no tan buenas o que tienes que cambiar de amantes cuando empiezas a hablar con uno de tus hombres de gastos médicos y descubres que es un ser humano, no solo un falo. Es tan desilusionante como saber de dónde viene tu desayuno o las verduras.

Algunas veces te tengo en mi mente, pero preferiría que me tuvieras en tus brazos. Estas tan lejos y tan cerca, así haz estado por años y parece que este será uno más. Ojalá pudieras hacer a un lado tu indiferencia que está pisando un poco a mi ego.

Total, cuando llegan hombres que son un buen material para la seriedad, la familia, el perro y todas esas preciosidades para las que una mujer fue “educada” huyo, como si me pisaran la cola, se me erizan todos los vellos de mi cuerpo y corro, nada estable, todo girando, dando vueltas sobre mi eje.

Acabo de recordar que en unas horas será otro día de las madres. Sabes que la vida ya no te importa tanto cuando las fechas más comerciales de tu calendario gregoriano ya no te mojan las pantaletas como antes.

En fin, estos días, la vida, el mundo, las cosas no han ido mal, solo que no aprendo a estar bien.

lunes, 25 de abril de 2011

La santa de los labios rojos

Finalizan los días santos y termino como toda una virgen, con varios devotos debajo de mis faldas susurrando bajo, pidiéndome les haga uno de mis milagros, y con ese bribón que no se va, pero que no le digo que se quede.

En conclusión fue un fin de semana de buenas compañías, mucha comida, conocidos por conocer y mucho ronroneo de una que otra gata que chilla fuerte, que grita y araña.

Como todos los años tuve mi 22/4 de la muerte donde las pilas se me fueron para abajo, otro cuatro año de volver a lo mismo, las mismas canciones y esas fotografías que solo veo una vez al año, pero ese círculo no tiene fin o gira sobre su eje y vuelve al mismo punto, ese lugar intermedio.

Yo con él lo quería todo, las flores en la ventana, el café de las mañanas, tuve el mar, la luna, té y especias, tuve banderas rojas y amores suaves.

Y ahora no queda más que extrañar rasguños, cabellos, enojos, rosas y labios de lenguas extrañas, quitándome el aire sin respirar, solo suspiros y más suspiros, extraño a ese ladrón que me quitó el sueño.

Sé que merodea porque conozco su olor, su dulce olor pero no se acerca porque sabe que lo puedo morder, pero también quiero curar sus heridas y a la vez, no quiero nada, ni un hola ni un nosotros, así es cuando uno quiere a alguien, mejor que este solo a con una mujer del diablo, a veces ni de ella misma.


Özledim seni birtanem

lunes, 11 de abril de 2011

Vientos santos


No sé que pasó pero ahora todos son poetas, ahora todos escriben, ahora todos hacen rimas. Las letras se siguen prostituyendo, se venden al mejor postor, se revuelcan en cualquier página, con poemas huecos y pretenciosos, burlas falsas y mentiras que quieren hacer verdad. Somos unos escritores frustrados que queremos cambiar el mundo, pero no podemos cambiar ni nuestra vida.

El nivel de melancolía que tengo estos días es directamente proporcional al aumento de hormonas, quiero sexo, quiero llorar y un chocolate, te quiero a ti y te quiero fuera de mi vida, ando de sociópata ninfómana y robando uno que otro suspiro, nada mas te advierto que no los devuelvo.

Vientos del pasado volvieron a querer quedarse, no sé si es lo que quiero, como toda la vida con mis problemas existenciales que si no tuviera no seria yo misma o mínimo no estaría así de loca. Me entrego a ti y a la locura, son el ying yang de mi vida.

Como siempre a las andadas, con amantes de cuarta que besan con sabor a licor y uno que otro guapo que vale la pena pero como siempre me encanta sabotear mi felicidad y me niego a compartir la vida, soy muy egoísta y no la comparto más que con las nubes y las hojas de los arboles.

He dejado de escribir mucho, no es porque no quiera es solo que ya no sé que saldrá de mis dedos estoy hecha un collage de recuerdos, espantos, felicidad, uno que otro verbo y algunos gerundios olvidados, de esos que no uso en el trabajo.

Principio sin fin.

viernes, 25 de marzo de 2011

Limpiando basurita

La vida cambia en un abrir y cerrar de ojos, sin embargo parece que gente algunas veces estamos estáticos; sin un movimiento aparente y pensando: “Este atardecer ya lo había visto”.

Estos días han sido nuevos y repetitivos, de alguna forma acíclicos y siguiendo un patrón, yo solo alisto mis tijeras y recorto por la línea recomendada, pero como siempre término dibujando círculos que no se cierran y viejos amores que no se olvidan.

Si alguien pudiera decirme en que tienda departamental puedo devolver todas las responsabilidades adultas que me dieron se lo agradecería, guarde el recibo en la bolsa del pantalón y las etiquetas en caso de que me pregunten algo.

Últimamente ya no tengo a quien dedicarle mis versos ni mis letras, nuevamente me volví espectadora del amor en lugar de protagonista, duele pero es más triste tener a alguien que no te quiere a tu lado. Ya después uno solo aprende a aceptar las cosas, el amor no fue hecho para mí o de perdida no me explicaron como usarlo, solo recuerdo sabias palabras: el amor no se ruega ni se destruye, solo te transforma.

Irónicamente ahora me buscan los que di por muertos alguna vez, ex novios que varias coordenadas geográficas han vuelto a mí, hasta un cholo con el que andaba cuando tenia como 16 años, la verdad no me interesa nadie, apenas y me intereso yo por el momento.

Así que seguiré asistiendo a bodas que ya parecen epidemia, siendo testigo del amor ajeno, con fines de semana llenos de excesos y tacones muy altos que hacen ruido para anunciar cuando voy llegando, llego su mami perras y no voy a quitar el dedo del renglón.

DF



viernes, 11 de marzo de 2011

Un algodón rosado (y sin rosar)


Cuando tenia 6 años recuerdo que vi una fotografía en una enciclopedia llena de estrellas rojas, el texto decía: “La muerte de las estrellas”. Desde ese día que mi cuenta que la vida no esta hecha más que por ciclos, todo lo que comienza algún día va a terminar, irónicamente ahí nació mi miedo a envejecer.

Con el paso del tiempo veo que siguen ciclos en mi vida, decisiones, reglas, mucha estupidez e impulsividad de mi parte y uno que otro algodón de azúcar para los dolores del corazón, esa es una vieja receta que me funciona desde una vez que me caí en un juego en una feria cuando tenia unos 8 años calculo yo. Para la cantidad de glucosa que he comido en mis años de existir me extraña no ser diabética.

Por el momento sigo cerrando círculos, rompiendo recuerdos y conservando amistades en una maletita que me voy a llevar en unos meses, los planes siguen igual, mi mudanza continúa, solo que lo pensé bien y tengo que terminar cosas que pensaba dejar incompletas. Hace unos días decidí que realmente quiero irme, no huir, lo que seria una gran diferencia a mis “escapadas” temporales de mi rancho, pero siempre tengo que volver a concluir lo que deje a medias. Ya es hora de actuar como una niña grande.

En lo que respecta a mi gatita de alfombra, esta arañando los muebles y dejando de perseguir reflejos. Ella no me dijo nada, solo escribió en su tazón de leche y sus ojos que hacen versos: “Te quiero como gata flaca perseguida y llorona, te quiero como gata gorda de tanto estar mimada”. Espero pasar el fin de semana con ella que no la he visto desde el viernes de la muerte y la extraño, somos mujeres fuertes y de peores cosas hemos estado mejor.