viernes, 30 de octubre de 2009

Hace 300 años..


Hace unos 300 años, un señor llamado Don Antonio Deza y Ulloa, gobernador de Nueva Vizcaya decidió fundar, un 12 de octubre de 1709, un ejido llamado San Felipe del Real, el cual contaba con un clima semidesértico, donde parecía que no se podía desarrollar una sociedad y con un clima ingrato, pero Don Antonio confió en los 2 ríos que pasaban por ese inhóspito lugar: el río Chuvíscar y el Sacramento, los cuales brindarían agua a los pobladores de la nueva y salvaje tierra.


Todo esto, esta detallado en miles de páginas en el internet, así como quedó plasmado en los murales de Piña Mora en el Palacio de Gobierno de la ciudad, yo recuerdo haber crecido leyendo esto en los libros de historia, viendo a la estatua que se encuentra enfrente de la Catedral del Centro Histórico donde señala casi diciendo: “Aquí merito la quiero, porque así lo decidí”.


El nombre de San Felipe del real fue en honor a Felipe Quinto de España, y esta llegó a la categoría de villa en 1718, pocos años después de su fundación, son datos históricos muy importantes para la entidad, pero yo me preguntó, ¿Dónde estaban las mujeres?


Según datos de los archivos, cuando se fundó la ciudad, eran 31 peninsulares, quiero creer que de perdida para eso necesitaron algunas mujeres, las cuales, en esa época tenían un promedio mínimo de 5 hijos (había que poblar la tierra abandonada), por desgracia la tasa de mortalidad, como en casi todas las épocas era con una mayoría femenina, en esos tiempos, era porque eran las que daban vida, así que cuando una moría, en las actas de defunción solo ponían un “murió de parto”.


En esos años, las mujeres solo eran madres, esposas o hijas, sus tareas solo iban acorde a su estatus social, por ejemplo, las que estaban relacionadas con los dueños de las minas, solo se dedicaban a bordar, a organizar bailes, las de clase media-baja, hacían pan y actividades culinarias, y las indias hacían todo lo demás, como dar servicios a las casas, el campo, todo.


Una antropóloga me platicó una vez que en unos archivos encontraron a una panadera de San Felipe del Real, la cual logra vivir separada del esposo (En esos tiempos no existía el divorcio) pero, a su mala suerte, esa mujer era muy adelantada para sus tiempos, ya que los hombres no querían hacer negocios con ella.


Todo el machismo que existe en el norte, llegó junto con sus primeros pobladores, haciendo de las mujeres personas sumisas, al servicio de los partos y de su hombre.


En noviembre de 1702, en Cusihuiriachic, un señor llamado Bartolomé Gómez, denuncia el primer registro minero en Chihuahua; curiosamente, ninguna mina fue registrada bajo el nombre de una mujer, y ninguna perteneciente a dicho sexo podía entrar a una, ya que según los mineros, las minas son mujeres, y si otra fémina entra en ella, la mina se pone celosa y deja de dar producción.


Santa Rita de Casi, es la santa de los mineros de Chihuahua, también es la patrona de las causas difíciles y las mujeres afligidas; la edificación de Santa Rita, fue construida por una mujer con problemas con su esposo.


En esas épocas, las mujeres adultas superaban en número a los hombres. El primer censo completo que se realizó en San Felipe del Real, mostró que las mujeres que existían en la ciudad eran 1612, y los hombres eran tan solo 826, lo que nos hace suponer que muchas vestían santos, o existía una repartición casi alusiva al ganado repartiendo en algunos casos 2 mujeres por hombre.


En conclusión, la historia no solo fue formada de hombres, a su lado había una enorme cantidad de féminas, quienes sufrieron las mismas desventajas climáticas y lucharon por la misma causa, ya sea desde su casa, educando a los futuros habitantes, alimentando a los conquistadores, o sembrando su comida, todas ellas tuvieron un rol importante que raras veces es reconocido socialmente; lamentablemente tenemos la mentalidad de que se hace todo lo del hogar porque así es como debe de ser, pero no tomamos en cuenta las mujeres que hacen leyenda junto con los que salen en los cuadros, o en los libros de historia, ¿Qué hubiera hecho Trasviña y Retes sin su esposa María Rosa Ortiz de Campos? Seguramente nunca hubiera sido sargento mayor, porque sin alguna dama que lo atendiera, hubiera estado muy ocupado planchándose su ropa, haciéndose su comida, y lavándose sus platos. Nosotras hacíamos el trabajo sucio, y ellos son los que se llevaban el crédito.


Pero en fin, esto paso hace 300 años, lo que me cuestiono ahora es ¿Ha habido realmente grandes cambios en la sociedad de San Felipe del Real?

4 comentarios:

  1. AMIGA ME FASCINÓ, LA MATERNIDAD EN SU MÁXIMA EXPRESIÓN, TOTALMENTE DE ACUERDO CONTIGO. ES BUENÍSIMO, UN TOQUE DESCARADO Y DIVERTIDÍSIMO DE ESE MARAVILLOSO MUNDO, Y ESO K AÚN NO TENGO EL PRIVILEGIO. ATT. PAMME O.

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  2. gracias nena, pero lo posteaste en el del tricentenario jajajajaja amiga mía usted me debe muchos tragos coquetos ..

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